Jueves 9 de May de 2013
Conoceremos en esta noticia, una de las técnicas utilizadas en los tratamientos de reproducción asistida que involucra al hombre, se trata de la recuperación quirúrgica de espermatozoides, una manera de conseguir los gametos masculinos cuando no sea posible de otra forma o bien, el hombre en cuestión produzca muy poca cantidad.
Se trata de un procedimiento que fue desarrollado para ayudar a extraer y a recuperar el esperma de los hombres que de otra manera no lo pueden generar, o bien para aquellos que tienen dificultades para producirlo por sí mismo. Cabe recordar que algunos hombres pueden eyacular aunque su líquido seminal contiene muy pocos espermatozoides, o bien estos son de una calidad demasiada baja para lograr un embarazo, lo que se denomina oligospermia.
Este procedimiento es sencillo y consiste en extraer los espermatozoides directamente de los genitales, en lugar de recogerlos luego de la eyaculación. Así, se logrará captar una cantidad suficiente de espermatozoides en aquellos hombres que naturalmente no eyaculan una cantidad suficiente, o en todo caso, no son de una buena calidad.
Con estos espermatozoides recuperados lo que suele hacerse es un procedimiento de ICSI “ inyección intracitoplasmática", por la cual se inyecta directamente un espermatozoide seleccionado dentro de un óvulo para generar la concepción.
Cerca del 10 por ciento de los hombres que tienen infertilidad masculina tienen pocos espermatozoides en su semen. Las razones son varias, siendo las anatómicas, por ejemplo una obstrucción o bloqueo en los conductos deferentes, siendo éstos los tubos que transportan el esperma hasta el pene, una total carencia de dichos conductos, o una obstrucción o bloqueo del epidídimo, que es el órgano encargado de conectar los conductos deferentes con los testículos.
Estos hombres producen esperma sano en los testículos, pero éste no puede salir. Existen diferentes tipos de recuperación quirúrgica del esperma. La aspiración o succión vasal se utiliza en hombres a los que se les ha practicado una vasectomía, o tienen obstruidos los conductos deferentes. Con anestesia local, se extrae con una jeringuilla el líquido de los conductos deferentes, donde habitan los espermatozoides. La aspiración percutánea de espermatozoides utiliza un catéter que se inserta por el escroto hasta llegar al epidídimo.
En la aspiración microepididimal de esperma, lo que se hace es realizar “ bajo anestesia general o sedación profunda “ una pequeña incisión en el escroto para llegar precisamente al epidídimo. Allí se drenará el fluido.
Si no llegara a encontrarse ningún vestigio de esperma en los fluidos epididimales, se insertará una aguja dentro de los testículos, procedimiento denominado extracción de esperma testicular. Se extrae una muestra de tejido para ver si allí es posible encontrar espermatozoides.
La tasa de éxito posterior a estos procedimientos es realmente variable, pues depende de las características particulares de este hombre, y de su pareja femenina. Pero sin dudas, abren una luz de esperanza para muchos.
