Jueves 6 de Junio de 2013
El nervio ciático es el más largo del cuerpo que se extiende desde las vértebras lumbares (parte baja de la espalda) pasa por la cara posterior del muslo y de las piernas hasta el talón del pie.
El dolor que viaja por esta ruta se conoce como ciática.
Ésta se presenta cuando existe presión sobre el nervio causado por lesiones de las vértebras lumbares, inflamaciones del nervio (neuritis) o contracturas de los músculos cercanos al nervio ciático.
Recomendaciones
Nunca doblar la columna para recoger algún objeto del suelo; es necesario flexionar las rodillas, ya que cuando doblamos la columna, la presión que se ejerce sobre las vértebras es 10 veces su peso.
Dormir sobre un colchón adecuado para la columna vertebral. Para poder determinarlo, se requiere tumbarse boca arriba y meter la mano entre la columna lumbar (por encima de los glúteos) y el colchón. Si la mano tiene dificultades para ir hacia arriba o hacia abajo, el colchón nos va bien. Si no se puede mover la mano, es blando, y si se mueve con mucha facilidad, es muy duro.
No utilizar ropa ceñida o apretada.
Sentarse con la espalda recta.
Evitar la práctica de ejercicios bruscos o ciertas posiciones y movimientos típicos del yoga.
No permanecer sentado en una silla muy dura durante un tiempo prolongado.
Evitar las caídas o los movimientos bruscos.
Remedios naturales:
–Cocer 4 patatas y machar hasta conseguir un puré. Extender el puré sobre un paño amplio y limpio, a modo de emplasto y colocar sobre la región lumbar. Fijar con la ayuda de una camiseta. Mantener así hasta que pierda el calor. Repetir un par de veces al día.
–Cortar una cebolla por la mitad y con la parte interna de una de las mitades masajear, mediante suaves círculos, la zona afectada por 10 minutos. Repetir la operación, en caso de ser necesario, a la hora y media o dos horas.
–Masajear la zona con una mezcla de jengibre molido y aceite de sésamo.