Viernes 3 de May de 2013
No mire los mandamientos de Dios como pesadas obligaciones, sino como tareas para el alma. Ellos son caminos para llegar al cielo y escaleras para subir hacia donde están los premios.
El presente texto no lo va a invitar a hacer planas ni nada por el estilo. Sin embargo, sí le quiere recomendar la sana costumbre de ‘escribir su vida’ con buena letra y siguiendo el dictado de Dios.
¡Solo así se obtiene su Bendición!
Cuando usted se lo permite, Él entra en su corazón y, por ende, cubre a su familia, a su hogar, a su empleo, a sus finanzas, a sus proyectos, en fin…
Algo más: siguiendo las líneas del Altísimo, usted acepta con entereza cualquier vicisitud que toque a su puerta.
¿Qué hacer cuando no se le encuentra salida a un problema?
¡Déjelo en manos de Él!
Ponga su fe a prueba invocando su Santo Nombre. Incluso las más pesadas montañas pueden ser removidas por quien se arrodilla pidiendo ayuda.
¡Y orar es un camino!
De hecho, los milagros más maravillosos y los cambios más portentosos se dieron tras devotas jornadas de plegarias.
Solo se debe hacer una aclaración: hay que pedir con la esperanza de escuchar a Dios, no esperando que Él lo escuche a usted. Mejor dicho: hay que seguir su dictado.
Estar acorde con la ‘caligrafía espiritual’ es fundamental, sobre todo cuando se atraviesa por circunstancias y por esos momentos en los que la vida lo sumerge en un estado de tristeza.
Ore mucho cuando le lleguen esos días en los que nada parece gustarle e invoque fuerzas para mirar hacia el frente y para que jamás se diluya su fe.
Puede estar pasando por momentos difíciles, incluso insoportables; sin embargo, Dios le está preparando bendiciones que jamás ha imaginado. ¡Tenga paciencia y no decaiga!
Usted y en general todos los seres humanos somos débiles. Podemos despertar por la mañana con una canción en los labios y terminar el día aullando de rabia.
Por fortuna, Dios nos comprende y nos regala un sol que, a pesar de las nubes, brilla.
Debe entender que Él siempre toma sus angustias en sus manos y las cobija con sus brazos. De hecho, no cae ni una gota de agua sin que Él lo decida.
Si llegó a este punto del texto, haga la siguiente oración:
Señor: Sigo sus pasos con la certeza de que podré comprobar una vez más que está presente y a favor mío en todas las batallas que deba emprender. Le doy gracias por su Bendición y le pido fortaleza y entereza para asumir todo lo que me ocurra. Sé que al acostarme hoy me acompañará y no permitirá que ninguna pesadilla afecte mis sueños.
¡TOME LA DECISIÓN!
¿Qué es una decisión? La palabra significa determinación; es una resolución que se toma o se da en una cosa dudosa. Si usted está decidido a hacer cambios personales, en realidad ya está andando el camino para llegar hacia sus deseos.
¿Y ESA PRISA?
Resulta dañoso vivir atrapado en un remolino de afanes por el futuro, de tristezas por el pasado y de desilusiones por el presente. Lo realmente provechoso es gozar del terruño y de las pequeñas realizaciones que logramos conseguir cada día.
SEA SOLIDARIO
Ayude a quien le pide un favor; si se lo solicita es porque necesita de usted. Nuestro espíritu necesita darle una mano al que todavía vaga en la oscuridad. La próxima vez que alguien le pida una colaboración, si está en sus posibilidades dársela, no dude en hacerlo.
Cita bíblica
“Bueno es saber callar los secretos de los otros, pero más valioso es contar y proclamar los favores que Dios y los demás nos han concedido”.
Si quiere…
Si quiere tener el mar, contémplelo, abra sus manos en sus aguas y todo el mar estará en ellas; porque si las cierra para retenerlo, las manos se quedarán vacías.
Si quiere tener el viento, extienda sus brazos y abra sus manos y todo el viento será suyo; porque si quiere retenerlo, se quedará sin nada.
Serenidad, por favor
Si quiere triunfar y vivir en paz tiene que aprender a controlar sus reacciones, sus palabras, sus sentimentalismos, sus rabias y sus emociones.
¡Sorpréndase!
Lo mejor que uno puede hacer es sorprenderse a sí mismo.