Jueves 23 de May de 2013
La hepatitis es una enfermedad que provoca la inflamación del hígado y actualmente existen 3 Hepatitis A, Hepatitis B y Hepatitis C.
La hepatitis produce alteración del funcionamiento del hígado, por lo cual el proceso de digestión se ve afectado.
Se recomienda utilizar alimentos muy suaves, que no necesiten de gran esfuerzo hepático para ser digeridos y absorbidos.
Los alimentos ricos en grasas o las preparaciones que agregan grasa, como por ejemplo las frituras, deben evitarse por completo ; evite el alcohol, los estimulantes (cafeína, guaraná, chocolate, etcétera) y beba agua para evitar la deshidratación.
Entre los productos a evitar estarían: principales virus que pueden provocarla. Son nombrados en orden alfabético:
Conservas en aceite, chocolate, pescados grasos como atún o salmón, crema, manteca, margarina, frituras, condimentos picantes.
Y en caso de tener que tomar alguna medicación sin prescripción médica es vital que consulte a su médico: la mayoría de los medicamentos tienen incidencia hepática .
El reposo es importante para que el hígado se recupere favorablemente.
Alimentos permitidos
Lácteos descremados: leche, quesos untables, ricota, quesos magros de pasta blanda, mozzarella.
Huevo: evitar la yema y utilizar las claras, no fritos.
Carnes: Las primeras 3 o 4 semanas evitar las carnes rojas, utilizando aves y pescados.
Vegetales: utilizar todo cocido y evitar las de hoja y coles como brócoli, coliflor y repollo.
Frutas: Preferentemente cocidas y sin cáscara.
Cereales y pastas: con salsa fileto muy suave, poco aceite o queso untable descremado.
Pan: Blanco o negro preferentemente tostado al horno.
También azúcar, jalea, miel, dulce de batata, membrillo.
El cuidado de la alimentación y el reposo permite que el hígado se recupere correctamente y no queden secuelas.